Autoridades policiacas informaron que aunque hasta el momento desconocen todo lo relacionado con el asesinato de este hombre, casi tienen la certeza de que fue ajusticiado en una venganza de presuntos delincuentes, lo anterior por la forma en que se dieron los hechos y por las condiciones en que fue encontrado su cuerpo.
Moradores del citado inmueble al percatarse que sobre la acera se encontraba envuelto en una cobija el cuerpo de un hombre al que sólo le salían los pies, de inmediato dieron parte a las autoridades policiacas, por lo que minutos más tarde se presentaron en el lugar del hallazgo policías judiciales, peritos y el ministerio público del centro de justicia de La Presa, para dar fe de los hechos.
Durante las primeras inspecciones oculares que se practicaron en el lugar, el MP informó que el ahora occiso estaba envuelto en una cobija azul, la cual estaba perfectamente amarrada con cinta canela.
Más tarde, cuando el macabro paquete fue abierto, el representante social dijo que el desconocido tenía envuelta en la cabeza una toalla beige y una bolsa de plástico transparente, además de que presentaba visibles huellas de tortura, un balazo en el cuello, otro en el parietal del lado izquierdo, uno más en la clavícula del lado derecho y otra herida por arma punzocortante a la altura del occipital del lado izquierdo.
Por la brutalidad con que fue cometido este asesinato y por las condiciones en que se encontró el cuerpo, la Policía Ministerial reiteró la hipótesis de que este sujeto fue asesinado en una clara venganza de delincuentes, al parecer dedicados a la venta y distribución de drogas, por lo que un intento por aclarar el crimen, ya inició con las investigaciones correspondientes.
Vecinos y curiosos que se congregaron en la zona, aseguraron a la policía que no conocían al occiso, a quien incluso nunca antes habían visto siquiera deambular por el lugar.
Del desconocido, el único dato que se dio es que era de aproximadamente 30 años de edad, 1.64 metros de estatura, complexión atlética, pelo corto lacio negro, frente amplia, nariz recta, boca grande, labios gruesos y que vestía una playera negra tipo polo de la marca Tommy, pantalón de mezclilla azul Levis, boxer azul marino, zapatos negros tipo mocasín y que como seña particular presentaba un reloj de acero de la marca Tommy y tres lunares en el tórax.
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