Los cuerpos de dos hombres ejecutados, uno de ellos decapitado, hallados la noche del pasado domingo en la Colonia Las Palmas, hasta ayer no habían sido identificados, aunque trascendió que la Policía Ministerial del Estado tenía indicios sobre su identidad.
Los cadáveres fueron localizados uno sobre otro en una calle de la citada colonia, a unos metros de la carretera a Matehuala, próximo a su cruce con la Avenida Valentín Amador.
Uno estaba decapitado y, sobre su pecho, estaba colocada su cabeza, así como una cartulina en la que se advertía que había sido asesinado por filtrar información a los militares, firmada por un grupo delictivo.
Fue minutos antes de las 0:00 horas de ayer cuando al sistema telefónico de "emergencias" 066 se reportó, de manera anónima, que dos cadáveres estaban en el lugar, lo que más tarde verificaron patrulleros de la Policía Estatal, que dieron aviso a las autoridades ministeriales.
ARRIBARON FEDERALES
A RESGUARDAR LA ZONA
La zona fue acordonada y vigilada por policías federales, en tanto la autoridad ministerial se encargaba de realizar sus diligencias en el lugar; luego, los cuerpos fueron trasladados a las instalaciones del Servicio Médico Legal.
Entre la ropa de los hoy occisos no se localizó alguna identificación, ni otro documento que permitiera saber sus identidades, pero se estimó que tendrían entre 25 y 30 años de edad. Ambos presentaban lesiones por tortura, pero no se precisó si también por proyectil de arma de fuego.
Además, uno estaba decapitado -su cabeza fue dejada sobre su pecho-, y el otro tenía cortada su mano derecha, la cual sus verdugos la colocaron en su boca.
Aunque agentes ministeriales tendrían indicios sobre la identidad de los hoy occisos, hasta ayer ninguna autoridad había emitido algún pronunciamiento sobre ambos ejecutados.
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Los cadáveres fueron localizados uno sobre otro en una calle de la citada colonia, a unos metros de la carretera a Matehuala, próximo a su cruce con la Avenida Valentín Amador.
Uno estaba decapitado y, sobre su pecho, estaba colocada su cabeza, así como una cartulina en la que se advertía que había sido asesinado por filtrar información a los militares, firmada por un grupo delictivo.
Fue minutos antes de las 0:00 horas de ayer cuando al sistema telefónico de "emergencias" 066 se reportó, de manera anónima, que dos cadáveres estaban en el lugar, lo que más tarde verificaron patrulleros de la Policía Estatal, que dieron aviso a las autoridades ministeriales.
ARRIBARON FEDERALES
A RESGUARDAR LA ZONA
La zona fue acordonada y vigilada por policías federales, en tanto la autoridad ministerial se encargaba de realizar sus diligencias en el lugar; luego, los cuerpos fueron trasladados a las instalaciones del Servicio Médico Legal.
Entre la ropa de los hoy occisos no se localizó alguna identificación, ni otro documento que permitiera saber sus identidades, pero se estimó que tendrían entre 25 y 30 años de edad. Ambos presentaban lesiones por tortura, pero no se precisó si también por proyectil de arma de fuego.
Además, uno estaba decapitado -su cabeza fue dejada sobre su pecho-, y el otro tenía cortada su mano derecha, la cual sus verdugos la colocaron en su boca.
Aunque agentes ministeriales tendrían indicios sobre la identidad de los hoy occisos, hasta ayer ninguna autoridad había emitido algún pronunciamiento sobre ambos ejecutados.
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