Colgadas fueron encontradas esta madrugada cinco personas, en diferentes puentes de las salidas norte y sur del puerto de Mazatlán.
Las víctimas no portaban identificación alguna y la mayoría de ellas presentaba huellas de tortura.
Una de las víctimas fue descubierta pendiendo de un puente peatonal en la Colonia Urias, al sur de esta ciudad.
Se trata de una persona no mayor de 25 años, tez morena, complexión regular; vestía pantalón de mezclilla azul, camisa café, calcetines y cinto café.
Los otros cuatro pendiendo en un puente del ejido El Venadillo, sobre la vía México 15 y la Maxipista.
Estas personas son de aspecto joven, tez morena, complexión delgada, así como una de ellas estaba en short tipo bermudas y el resto en pantalón de mezclilla, camisa de resaque y sudadera.
En ambos escenarios, a un costado de los cuerpos se encontraron paquetes de tortillas, en señal de que pertenecían a un grupo del crimen organizado.
Decenas de automovilistas fueron testigos del macabro hallazgo, quienes no se atrevían a detenerse para no verse involucrado y enfrentar "preguntas" de las autoridades investigadoras.
Los cuerpos estaban pendiendo del cuello a cables y algunos de ellos tenían marcas de que fueron maniatados de pies y manos con cinta industrial gris.
Las víctimas fueron desprendidas y llevadas al anfiteatro de la PGJE hasta su plena identificación.
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Las víctimas no portaban identificación alguna y la mayoría de ellas presentaba huellas de tortura.
Una de las víctimas fue descubierta pendiendo de un puente peatonal en la Colonia Urias, al sur de esta ciudad.
Se trata de una persona no mayor de 25 años, tez morena, complexión regular; vestía pantalón de mezclilla azul, camisa café, calcetines y cinto café.
Los otros cuatro pendiendo en un puente del ejido El Venadillo, sobre la vía México 15 y la Maxipista.
En ambos escenarios, a un costado de los cuerpos se encontraron paquetes de tortillas, en señal de que pertenecían a un grupo del crimen organizado.
Decenas de automovilistas fueron testigos del macabro hallazgo, quienes no se atrevían a detenerse para no verse involucrado y enfrentar "preguntas" de las autoridades investigadoras.
Las víctimas fueron desprendidas y llevadas al anfiteatro de la PGJE hasta su plena identificación.
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