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Un comando de hombres armados mató a 13 personas en el centro de rehabilitación “El Camino AC” en la ciudad fronteriza de Tijuana.

Al lugar ingresó un grupo de sicarios que de inmediato sometió a 13 de los internos, que en ese momento se encontraban en la sala viendo una película.

Posteriormente, el grupo llevó a los jóvenes hasta el patio del lugar, donde los colocó en formación frente a una pared. Tras ésto, el comando abrió fuego y se fugó del lugar en al menos dos unidades de reciente modelo.

Los sobrevivientes señalaron a las autoridades que esta matanza se registró en menos de cinco minutos.

Un paciente, que pidió ser identificado solamente como “Jesús”, dijo que miraba una película en el primer piso del edificio la noche del domingo y salió a buscar algo de comer cuando ocurrió el ataque.

Cuando regresó, otros pacientes le dijeron que hombres armados obligaron a las víctimas a echarse al suelo y les dispararon. También sobrevivieron otros internos que dormían en el segundo piso del centro de rehabilitación, que suele albergar a unas 45 personas. 

Fuentes oficiales indicaron que de acuerdo con el encargado del centro, Melquíades Hernández Esparza, al encontrarse en los dormitorios escuchó detonaciones de arma de fuego y vio que salían del lugar cuatro hombres con pasamontañas y armas largas. 
El ataque contra el centro privado es el primero de este tipo en Tijuana.

Desconocidos interfirieron la frecuencia de radio policiaca para advertir que esto es una prueba de lo que es Juárez y amenazaron con que serán 135 asesinatos, en posible alusión a las 134 toneladas de mariguana que autoridades bajacalifornianas decomisaron el pasado 18 de octubre. De manera intermitente retomaban la señal policiaca para tocar música de narcocorridos, mientras insistían que esto “apenas empieza”.

El Presidente Felipe Calderón consideró hace dos semanas que Tijuana es un ejemplo de éxito de la estrategia gubernamental contra el narcotráfico, y como muestra refirió que los homicidios habían ido a la baja desde 2008, cuando habían alcanzado el nivel más alto.
Desde entonces, grupos del narcotráfico han reanudado actividades violentas no vistas por meses, al decapitar rivales y colgar cuerpos en los puentes.

Tijuana es considerada el lugar del cártel de los hermanos Arellano Félix, la mayoría de los cuales están detenidos o han muerto en los últimos años.

Residentes han expresado su temor de que los cárteles intensificaron deliberadamente la violencia para minar el mensaje de Calderón.

Más de 28 mil personas han muerto por la violencia vinculada con el tráfico ilegal de drogas, desde que el Mandatario asumió el poder en diciembre de 2006.

La Policía no dijo cuál podría ser el motivo para el ataque, pero los narcotraficantes han atacado centros de rehabilitación en otras ciudades para eliminar a integrantes de bandas rivales (ver cronología).

El director del Instituto de Psiquiatría del Estado de Baja California, Luis Enrique Dorantes, comentó que el centro de rehabilitación “El Camino AC” no se encuentra en la lista de las instituciones vigiladas por el Instituto de Psiquiatría.