NARCOCULTURA

martes, 11 de enero de 2011

La ONU prevé que la violencia en México continúe por tiempo indefinido



 El representante regional de la Oficina de las Naciones Unidas Contra el Delito y las Drogas, Antonio Mazzitelli, advirtió que la violencia en México, como en América Latina, es un problema de control de territorio y que este fenómeno permanecerá por tiempo indefinido.  

En conferencia de prensa, sostuvo que "no se necesita ser la ONU para darse cuenta de que el problema de la violencia en México es difícil y delicado, sólo basta ver los números sobre muertos que genera el crimen organizado".  

Al dar a conocer la creación de un Centro de Excelencia de Información sobre Seguridad Pública, Victimización y Justicia, el representante de la ONU dijo que todos los especialistas coinciden en que la violencia "está destinada a seguir por algún tiempo, no se sabe cuánto, pero va a permanecer la violencia".  

Sin embargo, reconoció que México ha dado pasos firmes para dar una respuesta estructural a esta situación delicada a través de las reformas propuestas; sin embargo, éstas deben implementarse con mayor celeridad.  

Señaló que en materia de reformas legales se ha avanzado, pero aún falta, y que también debe avanzarse en lo referente en la reconstrucción de las instituciones policiaca y a los sistemas de control de confianza, porque "los datos nos dicen que la velocidad deseada aún no se alcanza".  

En ese sentido, reiteró que la respuesta del Estado mexicano a la situación de la violencia debe complementarse con más reformas, porque la seguridad pública, la justicia y al gobernabilidad son un gran reto para el país.  

Consideró que contar con sistemas de información sobre los crímenes que se cometen, las condiciones en que se dan y un análisis metodológico de toda esta información, servirán para ayudar al Estado a enfocar las respuestas para hacer frente a la situación de violencia.  

Puntualizó que si el Estado mexicano cuenta con esta información sistematizada a través de una metodología adecuada, las políticas públicas en materia de seguridad podrán dejar de ser un sistema reactivo para convertirse en proactivo y de esta manera habrán anticipar sus respuestas a los fenómenos que se presenten. 

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