La violencia no cesa en la región citrícola y la mañana de este miércoles el municipio de Montemorelos sería el escenario para que se registrara otro macabro hallazgo.
Eran las 05:30 horas, cuando en la planta de radio de la Cruz Roja se recibió el reporte anónimo en el que se alertaba sobre la presencia de varias personas tiradas sobre el kilómetro 12 de la carretera Montemorelos-General Terán a la altura de la comunidad El Llano.
Los paramédicos se trasladaron al lugar encontrando varios cuerpos descuartizados, por lo que al no poder intervenir se retiraron de inmediato dando aviso a las autoridades policiacas.
Sería cuestión de minutos para que al filo de las 06:00 horas, el lugar se viera resguardado por elementos policiacos municipales, así como del Estado y Agentes Ministeriales, quienes al igual que elementos del Ejército Mexicano arribaron al sitio para acordonar el perímetro.
En el lugar se confirmó el hallazgo de tres cuerpos desmembrados y decapitados, dos de ellos con el paso de los minutos serían identificados plenamente por sus familiares quienes señalaron que se trataba del oficial de Policía de General Terán David Serna Navarro de 35 años, domiciliado en la colonia Burócratas Municipales en Montemorelos; así como el Comandante de la citada corporación identificado como Bernardino Rodríguez Franco de 58 años, quien habitaba en la colonia Morelos Uno también en Montemorelos.
Los dos elementos habían sido privados de su libertad el pasado lunes 24 de enero a las afuera de la comandancia de Policía de General Terán por desconocidos que tripulaban una camioneta de reciente modelo y que habían asaltado una gasolinera cercana al edifico policiaco.
Fue cuestión de horas para que sus cuerpos fueran abandonados en estas condiciones, sobresaliendo en la escena que la cabeza de uno de los elementos fue dejaba sobre el cofre de un vehículo en color gris que era exhibido en venta en un lote de autos improvisado.
La tercera víctima no fue identificada al momento y se descartó que tuviera relación alguna con la corporación policiaca o en su defecto que se desempeñara como policía activo; asimismo se logró observar que uno de los cuerpos presentaba orificios aparentemente de arma de fuego aunque no se confirmó esta información.
Los restos fueron levantados por personal del Servicios Médico Forense y trasladados al anfiteatro del hospital Universitario.
Se iguala cifra récord
El récord de policías ejecutados en el estado de Nuevo León ocurrió en junio de 2010, cuando fueron asesinados 16 elementos, misma cantidad que va en este mes de enero que aún no concluye, al confirmarse la muerte de los dos elementos del municipio de Terán.
Las ejecuciones iniciaron el 2 de enero, cuando gatilleros asesinaron a Carlos Gil Villalobos, oficial de tránsito del municipio de Apodaca.
La lista de elementos ultimados la encabezan los municipios de San Nicolás y Guadalupe, con tres cada uno.
En el caso de San Nicolás, los tres elementos victimados fueron atacados con fusiles de alto poder, mientras que en Guadalupe los policías fueron abatidos en dos hechos distintos. Dos elementos con apenas un mes en la corporación fueron asesinados a bordo de su patrulla
Les siguen los municipios de Cadereyta, Apodaca y General Terán, con dos elementos ejecutados, así como la Secretaría de Vialidad y tránsito de Monterrey, con un elemento, y la policía de Santiago con uno; además de un celador del Penal de Topo Chico.
Cabe destacar que durante el año del 2010 el único mes en el que no se suscitaron asesinatos de policías fue precisamente enero.
En los meses de agosto y noviembre del año pasado hubo una ejecución de un elemento policiaco, en febrero, mayo y septiembre la cifra subió a dos uniformados caídos.
Le siguieron en esa cifra roja el mes de octubre con tres bajas y el de diciembre con 6. Para marzo y julio las vidas perdidas fueron de ocho. En el mes de abril se sumaron 10 muertes mas; y en junio, con 16 elementos ejecutados, fue cuando se alcanzó la mayor cantidad de uniformados abatidos por el crimen organizado.

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