La Procuraduría de Justicia del Estado de México halló una fosa clandestina en la que se encontraron cuatro cuerpos de personas víctimas de secuestro.
El hallazgo se realizó en el poblado de Santa María en el municipio de Tlalmanalco, y el hecho se deriva de la balacera ocurrida ayer en la zona de Atlautla en la que secuestradores y policías de la Agencia de Seguridad Estatal se enfrentaron al percatarse los uniformados del secuestro del que era víctima un hombre dedicado a la operación de radiotaxis.
Tras el enfrentamiento, un policía y un secuestrador murieron. El hecho se dio en una casa de seguridad que utilizaban los plagiarios, en la que se encontró armamento, chalecos antibalas e insignias de diversas corporaciones policiacas.
La Agencia de Seguridad Estatal confirmó que tras la detención de cinco personas, entre ellas el director de Seguridad Pública municipal, Víctor Pérez Urquiales, se inició un operativo por información que proporcionaron sobre una fosa clandestina.
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